¿Por qué las Empresas Americanas ganan en Competitividad, en detrimento de las Europeas?
No sólo el informe Draghi. Otros estudios explican cómo el Viejo Continente se está quedando atrás. Se trata de algo más que debilidades estructurales.
“Si Europa no consigue ser más productiva, nos veremos obligados a elegir. No podremos convertirnos en un líder en nuevas tecnologías, en un faro de responsabilidad climática y en un actor independiente en la escena mundial. No podremos financiar nuestro modelo social. Tendremos que reducir algunas o todas nuestras ambiciones. Se trata de un reto existencial.” Publicado en septiembre de 2024, el informe de Mario Draghi (ex Presidente del Banco Central Europeo) fue extremadamente lúcido al advertir de las debilidades estructurales del Viejo Continente en comparación con América. «Per cápita, la renta real disponible ha crecido casi el doble en Estados Unidos que en la UE desde 2000», señaló el famoso informe.
Un estudio realizado por McKinsey, la consultora Trendeo y el Instituto para la Reindustrialización a principios de diciembre de 2024 confirma que Europa se está quedando atrás.
En el año 2024, Estados Unidos se ha convertido en el primer destino de la IED (inversión extranjera directa). En 2020, la UE y América representaban el 10% y el 12%, respectivamente, de la inversión industrial mundial. Cuatro años después, los porcentajes han aumentado al 12% y al 29% respectivamente. Y mientras la productividad ha aumentado un 1,8% anual en EEUU desde 2016, sólo ha aumentado un 0,7% en la UE... y cero en Francia.
Energía barata
Al promulgar normativas atractivas y generosos créditos fiscales para la inversión, como la Ley de Reducción de la Inflación (IRA), el gobierno de Biden ha puesto a Estados Unidos de moda. Los fabricantes europeos lo han comprendido. Por primera vez, sus inversiones en Estados Unidos están superando a las de Europa.
Todo es más fácil al otro lado del Atlántico. Las normativas son menos restrictivas y los precios de la energía más bajos. En los últimos diez años, gracias al gas y al petróleo de esquisto, Estados Unidos se ha convertido en un gigante de los hidrocarburos. Los recursos subterráneos y la presencia de una sólida red de infraestructuras hacen que Washington se beneficie de electricidad barata, a mitad de precio que en un país como Alemania. Los precios de la energía son claves aquí.
Los costes de la electricidad son más altos en los principales países de la UE (y en Japón) que en Estados Unidos (no siempre; en el caso de España son similares). En el caso de Alemania, el precio del kWh era casi el doble que en Estados Unidos en junio de 2023, momento en el que ya había pasado el pico de los altos precios de la energía tras la invasión rusa de Ucrania. En un país tan dependiente de la industria intensiva en electricidad como Alemania, esta diferencia de costes podría resultar muy perjudicial para la competitividad a medio plazo de la industria alemana.
Esta ventaja competitiva va a continuar con Donald Trump. El criterio »verde« para la inversión puede disminuir, pero el importe de las ayudas seguirá siendo igual de elevado.
Dos tercios de los centros de datos en Estados Unidos
Entre 2016 y 2024, el Viejo Continente acaparó el 30% de la inversión en I+D (44.000 millones de dólares), frente al 24% de América (35.400 millones de dólares). La diferencia es especialmente marcada en las tecnologías disruptivas (automatización, conectividad, IA).
En los últimos años, Estados Unidos ha recibido el 32% de la inversión en IA aplicada, mientras que el Viejo Continente sólo ha recibido el 20%. En el campo de los centros de datos, Estados Unidos es el primer país de origen (74%) y destino (67%) de la inversión.
El resultado: Estados Unidos encabeza la clasificación de la « fábrica del futuro », nomenclatura calculada en función de varios criterios (flexibilidad, tecnologías digitales, eficiencia energética, impacto medioambiental, responsabilidad social, etc.). Europa está rezagada, pero puede ponerse al día. En lo que respecta a las tecnologías del futuro, tiene palancas que puede utilizar ahora mismo.
Europa por delante, a veces
Algunos países europeos también tienen argumentos que esgrimir. Va por delante en energía renovable, y la diferencia se incrementa poco a poco en el tiempo.
También tiene ventaja (por ejemplo, Francia), en tecnología cuántica, que impulsa el aumento de la productividad. Pero la reindustrialización pregonada durante años por Emmanuel Macron tiene dificultades para materializarse.
Aunque las señales eran positivas entre 2021 y 2023, en 2024 el volumen de proyectos de inversión anunciados ha descendido (-10%) por primera vez en cinco años. Las industrias manufactureras (farmacéutica, metalúrgica) atraviesan dificultades. El saldo neto de aperturas de fábricas en Francia será negativo en 2024 (-15), mientras que en los últimos nueve años siempre ha sido positivo.
Quisiéramos saber tu opinión:
El informe Draghi ya señalaba las debilidades estructurales de Europa en comparación con Estados Unidos. A principios de diciembre de 2024, un estudio realizado por McKinsey, Trendeo y el Institut de la réindustrialisation confirmó que el Viejo Continente se está quedando atrás.
¿Por qué la industria estadounidense gana en competitividad, en detrimento de Europa?
Pues me tengo que leer esto con calma, pero de momento ya te digo que EEUU ha incentivado fiscalmente un montón de cosas bajo la administración Biden.
Para que luego digan que las políticas públicas no valen para nada. Otra cosa es que sea jugar en igualdad de condiciones o no. Pero bueno, de momento ahí lo dejo.